Septiembre 1957

PARA DIVERTIRSE en el agua no hay nada como este deslizador. Con él podrá moverse velozmente sobre la cresta de una ola o seguir la estela de una lancha automóvil que lo remolque a toda marcha. .También resulta ideal para moverse lentamente sobre un lago tomando baños de sol. Es seguro, liviano y muy resistente, por lo cual uno disfruta al usarlo y lo hace con confianza y sin preocuparse mucho de cuidarlo. Gracias a su armazón de tipo de "jaula," este deslizador pesa un tercio menos que uno común y corriente, y además tiene sobre éste las ventajas de ser mucho más resistente y poseer una capacidad de carga un tercio mayor. Como está forrado con fibra de vidrio, es perfectamente impermeable y los problemas del acabado se reducen al mínimo.

Para su construcción se emplean tablas de madera dura bien secas, de 1/8 de pulgada, salvo para la proa, que se hace de madera sólida y madera terciada de 1/4 pulgada, y para la popa, que es de madera sólida. Por lo general, para las piezas de madera sólida, se usa caoba, pero como el deslizador va forrado por completo, cualquier madera dura de buena calidad servirá. Para la construcción se necesitarán también dos planchas de madera dura de 4 x 10 pies. Comience por dibujar en una de ellas las 29 cuadernas necesarias, de las dimensiones que se indican en la figura 1. Córtelas luego con un serrucho, dejando sobrar un poco de madera en todo el contorno, y elimine luego este sobrante en una sierra de mesa. Esta resulta casi imprescindible debido a la exactitud con que deben cortarse los componentes de una jaula. Sin embargo, un artesano experto, poniendo mucho cuidado, puede realizar ese trabajo con un serrucho. Numere sucesivamente las cuadernas, comenzando por el número 2, pues la 1 se hace de madera gruesa. Abra en cada una de las cuadernas sendas ranuras para la quilla y la quilla de cubierta, y agrupe luego todas ellas en un montón, para asegurar el cual se introducen dos listones de madera dura en las ranuras para las quillas.

Las figuras 4 y 5 muestran la apariencia de este montón desde proa y popa, respectivamente. Después de colocar dos abrazaderas en la forma que se ve en esas figuras, abra las ranuras para los largueros inferiores. Como las cuadernas tienen diferentes alturas, haga dichas ranuras de algo más de 118 de pulgada, pues de esta manera los cortes en las cuadernas más angostas casi serán de la medida necesaria, y no importa que en algunas de las otras tengan más profundidad de la requerida. En la mayoría de las cuadernas de menor altura será preciso luego prolongar las ranuras un poco más, para lograr un ajuste conveniente. Debido a la forma irregular de las cuadernas, será necesario usar una guía adecuada para sostener el trabajo a escuadra con objeto de aserrarlo. Observe que las ranuras para los largueros están ligeramente desplazadas para dejarlos pasar, en la cuaderna No.1. A continuación, asegure dos abrazaderas sobre el lado opuesto del paquete de cuadernas, quite las que estaban colocadas y abra las ranuras para los largueros superiores en la parte de arriba de las cuadernas. Estas ranuras pueden cortarse de la profundidad exacta, ya que la parte superior del deslizador es plana.

Corte ahora los largueros y ambas quillas, todos de 1 3/4 pulgadas de ancho, y las últimas 1/4 de pulgada más largas que los primeros. Agrúpelos luego en un paquete, y proceda a la apertura de las ranuras, separadas entre sí 4 pulgadas, y de una profundidad de 7/8".

Las quillas y los largueros pueden armarse antes de encolar, para asegurarse de que todas las ranuras tienen la profundidad requerida, figura 6. Utilice cola impermeable de buena calidad, y limpie las aristas internas de todas las ranuras al armar la jaula. Instale primero la quilla de cubierta y los largueros, y prosiga con el bloque de popa, detalles en figuras 1 y 2. Coloque luego el conjunto invertido sobre una superficie plana y póngale algunos pesos encima a fin de que todas las piezas se mantengan correctamente alineadas y en contacto. Asegúrese de que las aristas superiores de los largueros y la quilla queden a ras con los bordes superiores de las cuadernas. Una vez que la cola se haya secado por completo, encole los largueros inferiores y la quilla, y vuelva a colocar pesos encima de las piezas hasta que se seque la cola.

La construcción de la proa, figura 2, se inicia por la cuaderna número 1, que se corta de madera dura. Observe que la altura de ésta es de 2 1/8 pulgadas -1/4 de pulgada menos que la correspondiente a ese punto-, debido a que es preciso tener en cuenta la diferencia de espesor de la madera terciada de 1/4 de pulgada que se usa para cubrir la proa y la madera dura de 1/8 de pulgada empleada en el resto del casco. En la plancha de madera terciada se abre un rebajo como el que se ve en la figura, para que entren los extremos de la cubierta y la base. Las piezas curvas de la armazón de la proa se hacen de acuerdo con los detalles de la proa indicados en las figuras 1 y 2. Note que la armazón es 1/4 de pulgada más ancha que la cuaderna número 1, en las partes donde se une a ésta. Estos sobrantes a ambos lados tienen el objeto de permitir una junta a ras con los revestimentos de los costados, de madera dura de 1/8 de pulgada. Según se ve en la figura 2, también forma parte de la sección de la proa una riostra central de forma triangular. La superficie inferior de esta riostra se bisela a lo largo de ambas aristas, con objeto de que la unión con las dos piezas de madera terciada de la base sea a escuadra.

En la cuaderna número l se abren muescas para encajar los largueros superiores e inferiores y las quillas, y luego se encola aquélla en su lugar. Se montan después y encolan las piezas de la proa, y a continuación se hace lo propio con la pieza superior de madera terciada, figura 8, que se asegura después con abrazaderas. Cuando la cola se ha secado, se pegan a la proa las planchas inferiores de madera terciada, que se sujetan luego con abrazaderas hasta que se seque la cola, figura 7.

Luego se procede a la instalación de la cubierta. Córtela de madera dura, dejando que sobre 1/4 de pulgada en todo su contorno. colóquela ahora, con la parte inferior hacia arriba, sobre una superficie plana, cubra con cola las aristas superiores de todas las cuadernas y largueros e invierta la jaula sobre la tabla de la cubierta. Distribuya pesos sobre el conjunto, asegurándose de que todas las cuadernas y largueros hacen contacto con la tabla en todos sus puntos. Cuando la cola se haya secado, corte las dos tablas laterales, dejando sobrar esta vez 1/8 de pulgada en todo el contorno.

Cubra los extremos de las cuadernas con cola, y sujete las piezas laterales en su lugar con abrazaderas, dejando que la parte sobrante se proyecte por debajo de las cuadernas. Una vez seca la cola, cepille los bordes de la cubierta hasta que queden a ras con los lados, como se ve en la figura 3. Corte a continuación las dos mitades del revestimiento del fondo, y pinte su superficie interna, así como todas las de la porción ya armada del deslizador, con barniz de intemperie o un sellador de vapor. Ahora se encolan las dos mitades del revestimiento del fondo, una después de otra, se aseguran luego a los costados, con abrazaderas, y se ponen pesos sobre ellas para que hagan contacto con todas las cuadernas y largueros. Cuando la cola está seca, abra con un taladro agujeros en los extremos de la cubierta, costados y revestimiento del fondo, e introduzca por ellos tornillos en el bloque de popa y la cuaderna. Cepille y lije todas las aristas del deslizador, para que queden suaves y redondeadas.

La última operación consiste en aplicar el forro de fibra de vidrio. Coloque el deslizador con la cubierta hacia arriba y cálcelo de modo que quede bien firme. Corte un pedazo de fibra de vidrio lo suficientemente grande para que cubra la cubierta y los costados. Pinte la cubierta con resina de poliester, dejando una tira seca de 3/8 de pulgada a lo largo de ambos bordes. Tome ahora la tela de fibra de vidrio y, comenzando por la proa, aplíquela sobre la cubierta, apretándola sobre la resina. A continuación pinte ambos costados del deslizador con resina, así como las fajas de 3/8 de pulgada que dejó sin pintar en la cubierta. Estire la tela hacia abajo sobre las aristas, y oprímala sobre la resina. Una vez seca ésta, invierta el deslizador y aplique la resina y el forro al fondo. Este forro debe traslapar al que ya cubre los lados, la proa y la popa.